El limón, mi limonero, es un árbol de mucho atractivo en jardines y bastante común, como todo requiere sus cuidados, aunque probablemente no conste de demasiada complicación su mantenimiento, en este artículo nos enfocaremos sobre todo en como podar un limonero.
Y la parte divertida ¿Qué da un limonero? Pues dejaremos la intriga, pero algo me dice que son limones. Entre otras cosas, hoy te enseñaremos como mantener podado tu limonero, puede tener muy graves complicaciones en su salud si no se hace correctamente ¡Así que presten atención los amantes de las limonadas 100% caseras!
Es muy importante saber cuándo hay que podar nuestro limonero
Y la verdad es que si se hace en ciertos momentos inadecuados, termina por perder mucho rendimiento, y podría incluso secarse por dentro.
Luego de haber analizado si realmente es necesario podarlo, si la respuesta es un firme si, debes tener en cuenta algunos aspectos importantes como:
El primero de todos es que no lo hagas cuando esté en un clima demasiado caliente, la poda de un limonero debe ocurrir en la primera cosecha de otoño, pero puede resumirse a que no se haga cuando esté haciendo calor, los mejores meses son septiembre y diciembre, pero nuevamente resaltamos, que después de la primera cosecha de otoño, puede variar según en qué país estés.
Y luego de esto, pasamos a como podar un limonero correctamente
Es de mucha importancia también protegerte a ti mismo, así que la utilización de guantes también es bastante recomendada, te protegerá de las características espinas que puede tener un limonero y alguna otra lesión que pueda surgir por cualquier situación.
Cabe resaltar que se deben utilizar cuchillas muy afiladas, tanto en tijeras como en otros instrumentos que vayamos a utilizar, su madera es muy dura, pero su corteza es bastante fácil de manejar.
Siempre comienza por las ramas que estén en mal estado, secas por lo general, de esta manera te aseguras de ir quitando lo malo, el objetivo de la poda, es dirigir la salvia del árbol hacia arriba, así se reparte más directamente desde las raíces hasta su copa, por eso, empieza por desechar todas las ramas de tu árbol que no lleven a ninguna parte y que, por eso mismo, estén taponando la vía principal, es decir, el tronco.
Luego de tener claro esto, asegúrate de equilibrar las ramas, no queremos que el peso termine por torcer ¡Y finalmente lo peor, tumbar! Tu limonero prefiere estar firme, entonces cortaremos las ramas de manera que pueda mantenerse lo más recto posible.
Vigila bien los chupones que puedan estar en tu limonero, pueden hacer mucho daño y significar parásitos que impidan que la salvia se mueva correctamente por tu limonero, el objetivo de que eso se dé, es que tu limonero sea fuerte, evitando que se seque.
Selecciona 3 ramas principales que estén alineadas, serán las encargadas de aguantar el fruto, estas serán el centro de atención en la poda de tu limonero, puesto que las mantendrás en perfecto estado el mayor tiempo posible, para esto, tendrás que podar eliminando los brotes o ramas que surjan de aquí, así te aseguras de que reciban correctamente todos los nutrientes necesarios para que sean lo más fuertes posibles.
Es importante podar las ramas secundarias que salgan de las principales, trata de podar todo aquel despunte que se vea débil, solo deja las ramas que se vean realmente solidas y fuertes. Si ves ramas que tapan la luz, o salen torcidas, probablemente molesten al tronco, es recomendable córtalas desde la base.
No lo podes antes de los 3 años sería demasiado pronto, y puede tener muchas dificultades o que se le haga imposible crecer sano, luego de tu primera poda, deberías tener un limonero limpio, de copa pequeña y con tan solo 3 ramas que tengan terminaciones de alrededor 20 centímetros.
En la primavera, ya es muy probable que veas los primeros frutos, estos los tendrás que quitar, y aunque te parezca muy mal, es una práctica muy recomendada que ayudará a que los siguientes frutos sean más fuertes.
Si lo mantienes bien podado e hidratado, de haber seguido todos estos pasos, tu limonero será más fuerte cada vez, es una práctica que lleva mucho esfuerzo ¡Pero tiene su fruto! En forma de cítrico y perfecto para las limonadas casera, ideal para los días calurosos.